Cuando hace casi tres semanas Ida Díaz Ayuso anunció que llevaría a los tribunales al Consejo de Ministros por el reparto de las ayudas europeas, sobre una partida de 9.000.000 €, para cuatro CCAA, Navarra, Extremadura, País Vasco y Comunidad Valenciana, el todavía presidente del PP de Extremadura guardó silencio. Igual le daba que el ataque de su compañera y sin embargo amiga fuera frontal contra nuestra región, Monago ha guardado un silencio sepulcral, cómplice con su partido de tratar de cercenar una ayuda finalista destinada a programas de empleo joven.
Monago, y con él su partido en Extremadura, con su silencio cómplice con Díaz Ayuso, se ha retratado como un dirigente que no quiere a su tierra, al que lo único que le interesa es su propio aparentar lo que no es, aparentar que se preocupa por esta tierra.
Sin embargo, ¡oh milagro! ha hablado sobre el asunto. Lo ha hecho para atacar con todas sus fuerzas al presidente de la Junta. Porque claro, que Diaz Ayuso no tiene nada contra esta tierra, que la exnovia del peluquero tiene razón, toda la razón para lanzarse contra el gobierno de la nación por el reparto de las ayudas europeas, que Pedro Sánchez y su gobierno están dando a dedo.
Bueno, en realidad, Monago ha disparado contra las escopetas y creo que se ha pegado un tiro en el pie. Un disparo con una escopeta que no sabe usar. Monago, o alguno de sus compinches, ha encontrado un hueco para atizar al gobierno regional. Porque, es cierto, la Junta de Extremadura tiene que devolver, o ha devuelto ya, 53.000.000 € de las ayudas para autónomos y pymes. Un escandalazo que es la muestra de que el gobierno socialista extremeño merece todas las maniobras que lleven a cabo el peluquero de cabecera de Diaz Ayuso, y el presunto presidente del PP, el ágrafo Pablo casado.
Todos los males, todos los infiernos y todos los calificativos despreciativos se merece Fernández Vara. A saber. Ineficiente en la gestión, y que esos 53 millones irán ahora a Madrid, a Castilla y León y Andalucía, por poner algunos ejemplos. Dice Monago que a él le duele Extremadura. Y Canarias, añado. Además pone en boca de sus correligionarios de otras CCAA que deben estar estupefactos (estupefacientes) de que Extremadura, esa región que es tan pobre, tan pobre, pero tan pobre, que solo tiene Monagos.
Pero ese Monago, tan viajero él, demuestra que sus diatribas contra Fernández Vara por esa devolución debería haberlas dirigido a sus compinches de Galicia, Castilla y León, Andalucía, Madrid, Murcia… Porque el jesusero que le haya dado el recorte de prensa de los 53 millones de €, le ha engañado como a un chino.
Al hacer esas declaraciones agarrado solamente a una liana, la de los 53 millones de €, en realidad lo que ha hecho ha sido cantar como un canario desechado de un concurso pajarero.
Y es así porque no solo Extremadura está en esa historia de las devoluciones de fondos, sino que Monago debería descalificar a Moreno Bombilla, a Fernández Muñeco, al colega de Dorado… Porque las devoluciones de esos fondos en realidad ha pillado a prácticamente todas las CCAA, y a algunas malgobernadas por el PP, sí, las gobernadas por los compinches de Monago. Y si no, pasen y vean.

Vale.