Feijóo dispuesto a perder Extremadura por el criterio de “la lista más votada”. Después de hacer números (vamos, de que le hagan los números, porque seguro sabe menos de aritmética que de geografía) ha llegado a la conclusión de que perder Extremadura argumentando lo de la lista más votada, eso le reportará ganar en otros sitios, en provincias, en capitales.
Vamos, que a Feijóo, Extremadura se la suda.
Después de los días de campaña, en los que la candidata de la derecha se desgañitaba pidiendo a Vara (antes de celebrarse las elecciones) que la dejara gobernar a ella. Después de celebradas las votaciones, y conocido el resultado, cuando Vara planteó su marcha a su puesto de trabajo de forense, la candidata, que ya se veía presidiendo la Junta, publicó un tuit en el que despedía con muy buenas palabras a Guillermo Fernández Vara.
Con lo que Guardiola no contaba era con el PSOE, un partido democrático, en el que la posición política la marcan los militantes a través de sus órganos de gobierno, pidieran a Vara que retirara su retirada y que presentara su candidatura a repetir en la Junta extremeña, porque para eso el partido había sido el más votado, había sido el que había ganado las elecciones.
Desde la presidencia del PP extremeño no entendían que Vara anunciara su marcha y al día siguiente anunciara que bueno, que de momento, no, porque ganar las elecciones da derecho a plantear su opción de gobierno. Tampoco entendían, ni entienden, que los militantes del PSOE son los dueños del partido. En el PP tienen otro concepto de democracia interna.
En estas hemos estado hasta hoy, cuando el exdirector de Correos ha dicho que Extremadura se la suda, que prefiere perder la comunidad autónoma a cambio de mantener en otros territorios el mantra de la lista más votada. Sin duda, le resulta más interesante, seguramente, que los habitantes de esta región.
Por supuesto, el mutismo se ha adueñado de la dirección pepera en la región, y la locuaz Guardiola calla. El Periódico Extremadura da la información que sale desde la sede regional del PP, y al mismo tiempo lo que ha dicho Feijóo en el pOgrama de Ana Liar Quintana, de manera que transmite ambas informaciones como paralelas o superpuestas, sin réplicas o valoraciones.
Aún no sabemos cuál es la posición de Guardiola tras esas palabras de Feijóo, pero debe estar tragando quina.
Esta tarde del 01/06, en el pOgrama Cuatro al día ha contestado a la posición del presidente de su partido que ella solamente tiene un jefe, que son los extremeños, no como Vara, que obedece solamente a Sánchez. La frase sobre “su” jefe no puede ser más populista.
Que el presidente del PP, Alberto Friend Narco, que seguramente tiene algo que decir en la estrategia nacional de su partido, secundado por los Bendodos correspondientes, y que su posición, al día de hoy, sea la de perder Extremadura por el beneficio de ganar en otros lugares y hacerse con mayor cuota de poder es doctrina de partido. Veremos en los próximos días la resistencia de la presidenta del PP de Extremadura y la capacidad de persuasión de la dirección nacional.
Pueden ser unos días divertidos, en los que tragar saliva puede llevar a algunos a atragantarse o, en el caso contrario, hacer prevalecer el rango de autoridad, para demostrar a otros osados quién manda.
Personalmente, no creo en la capacidad de resistencia de la presidenta de un partido de una comunidad pequeña, que para el PP y su presidente es, simplemente, prescindible.
Creo que si no alcanza un acuerdo inmediato con Vox y viable para la presidencia nacional, tendrá dificultades en la presunta autonomía que le ha dado Feijóo. O lo que es lo mismo, si no se echa en brazos del partido fascista cuanto antes, sin capacidad para rechazar posiciones más ultras que las suyas, la “polémica” entre el PP nacional y el PP regional puede levantar muchas ampollas.
Vale.