Archivos para mayo 2023

El Consejo de Ministros ha aprobado un acuerdo por el que se solicita al presidente del Gobierno la interposición de recurso de inconstitucionalidad, con el dictamen favorable del Consejo de Estado, contra los artículos 2, 3 y 4 del Decreto-ley 5/2022, de 31 de agosto, por el que se establecen medidas urgentes necesarias en la regulación del aprovechamiento de recursos minerales de litio en Extremadura.

Los fundamentos jurídicos giran en torno a que se considera inconstitucional establecer la obligación de que el tratamiento y beneficio metalúrgico del litio extraído en la Comunidad Autónoma de Extremadura se realice sólo en la Comunidad Autónoma de Extremadura.

Fundamentos jurídicos

Los fundamentos jurídicos en los que se basa el recurso son los siguientes:

1. Incompatibilidad con la configuración constitucional del demanio natural minero. Las minas se configuran como dominio público y, dentro del dominio público, como dominio público natural -que pertenece en todo caso al Estado, de acuerdo con el art. 132.2 de la Constitución Española (CE)- formando parte de la riqueza nacional, por lo que la supeditación de su riqueza al territorio autonómico implica quiebra de las competencias estatales en materia de igualdad de derechos, legislación civil y bases en materia minera y energética (art. 149.1.1ª, 8ª y 25ª CE), así como del principio de igualdad (art. 14 CE) y del derecho de propiedad (art. 33 CE). Todo ello, de acuerdo con la Jurisprudencia del Tribunal Constitucional y el dictamen del Consejo de Estado.

2. El establecimiento de una obligación al concesionario de que el tratamiento y beneficio del litio se realice en Extremadura supone una vulneración de la competencia estatal en materia de planificación de la economía (art 149.1.13ª CE), así como con los principios de unidad de mercado (art. 139.2), de libertad de empresa y libre competencia (art. 38 CE).

3. Las concesiones mineras se rigen supletoriamente por la normativa de contratos del sector público (Sentencia del Tribunal Supremo de 22 de octubre de 2019). Por ello, el establecimiento de una obligación como tal al concesionario implica una vulneración de la competencia estatal en materia de contratación pública, por incidir en los principios esenciales en materia de contratación, al imponer una obligación que no guarda relación con el objeto del contrato. Todo ello podría además vulnerar la normativa europea.

La Comisión Bilateral de Cooperación, en el seno del procedimiento previsto en el artículo 33.2 de la Ley Orgánica del Tribunal Constitucional, no ha alcanzado ningún acuerdo sobre la citada norma, pese a las diferentes propuestas planteadas desde el Ministerio de Política Territorial a la Comunidad Autónoma de Extremadura.

El 30 de abril, en una entrada de este mismo sitio, escribí: “En términos de realidad, el escrutinio de la noche electoral del 28-M dará el resultado que la voluntad de los cacereños quiera, pero no me atrevo a afirmar que la posición contraria o favorable a la mina sea determinante.

En 2019, el PP obtenía 13.457 votos y los citados 7 concejales. En 2023, el número de votos obtenidos ha sido de 20.445 y concejales 11.

En 2019, el PSOE obtenía 17.032 votos y 9 concejales. En 2023, el número de votos obtenidos ha sido de 17.054 y concejales 10.

En 2019, Vox obtenía 3.228 votos y 1 concejal. En 2023, el número de votos obtenidos ha sido de 4.667 y concejales 2.

En 2019, el Podemos obtenía 5.228 votos y 3 concejales. En 2023, el número de votos obtenidos ha sido de 3.444 y concejales 2.

Hay que señalar que en 2019, Ciudadanos obtuvo 5 concejales, por ninguno en 2023.

Los resultados, fríos, más allá de conocer la victoria del PP, que suben número de concejales, de 7 a 11, y que para gobernar necesitará de Vox para conformar una mayoría absoluta, los números, tanto de votos como de concejales no señalan, en ningún caso, más bien al contrario, que la posición sobre la mina pueda ser, como decía, determinante.

Los datos, fríos, indican que el PP, al que la Plataforma Salvemos la Montaña ha colocado en el grupo de los pro-mina, no ha sido castigado por esta variable. Tampoco el PSOE se ha visto castigado por esa posición atribuida, ya que mantiene prácticamente igual el número de votos obtenidos y aumenta en un concejal su representación. La suma de los concejales obtenidos por PP y PSOE es de cinco, el mismo número de representantes que tenía en 2019 el desaparecido Ciudadanos.

Queda por analizar los resultados de Podemos y Vox, a los que situaremos, por convención general, en los extremos del arco parlamentario. Así, Vox duplica su representación, y obtiene 4.667 votos, mientras que Podemos pierde un escaño y obtiene 3.445 votos.

La misma Plataforma coloca a Vox en el grupo de los pro-mina y a Podemos, en los contrarios, con una posición muy precisa tanto en declaraciones de su líder regional como en la señalada por la Plataforma, al ser el único partido que, expresamente, se ha colocado en contra de la mina, como algunos minoritarios de los variados que había en las urnas.

Si somos rigurosos, la subida en votos del PP llevaría a considerar, a modo de falso plebiscito, una importante representación de los partidarios de la mina. En esa rigurosidad, el PSOE ha mantenido prácticamente, el número de votantes de 2019, sin que su posición sobre la mina haya tenido alguna repercusión.

En cambio, en esa rigurosidad de los fríos datos, Podemos, abiertamente contrario a la mina ha perdido 1.776 votos, esto es, un 34% en número de votos respecto de 2019.

Los datos, los fríos números, señalaría que la posición contraria a la mina ha perdido por goleada. No es exactamente así, pero es una pista.

Lo curioso es que tras conocerse el resultado electoral, es decir, el frío número de votos y concejales, la reacción observada en la RRSS respecto del asunto de la mina ha sido la de cocear como mulo en una pequeña cuadra. Los contrarios a la mina deberían, a mi juicio, hacérselo mirar de cara a un futuro próximo y plantearse nuevas, novedosas estrategias que muevan la conciencia ciudadana, y a Podemos les queda un mundo por recorrer. No han hecho campaña, se han limitado a cuatro mensajes y medio, y si hubieran repetido, como ha hecho PSOE, su posición de 2019, y obtenido, por tanto, 3 concejales, la suma de la izquierda hubiera sido mayoría absoluta. Y Podemos debe reconocer su error de no hacer campaña.

Soltando coces no se irá a ningún sitio.

Vale.

Cuando la campaña electoral para el 28M está llegando a su final, van asentándose algunos puntos que, necesariamente, nos hacen sacar alguna sonrisa más allá de las muecas que algunos candidatos aciertan a colocar para las fotos oficiales, o para las fotos de prensa (los más afortunados) amiga que siempre los quiere sacar favorecidos.

En el año pasado se cerraron en Cáceres las tiendas de chuches Sánchez Cortés y algunos de sus locales fueron reemplazados por franquicias del mismo sector de mercado. Incluso la más céntrica, la situada en la calle parecida a la calle Larios de Málaga, también ha sido sustituida por otra franquicia de chuches.

Bueno, chuches electorales son algunas “ideas” que el candidato del Partido Popular ha ido colando en unos vídeos cortesía de algún usuario de las últimas versiones de autocad, en las que se regala a los posibles electores un caramelo electoral.

Así, la Plaza Marrón se ve alterada con una preciosista recreación renderizando unos planos para convertirla en plataforma única, con la pretensión de dar lucidez aún mayor al Museo Helga de Alvear. Evidentemente, no aparece ningún vehículo ni ninguna alternativa para vehículos que aparcan en el tramo superior de Camino Llano y que circulan de paso hacia otros puntos. Es decir, desahucian los aparcamientos sin alternativa aparcacional.

También, el candidato del PP presentó el primero de sus vídeos en el que mostraba cómo sería con ellos en el gobierno municipal la Ribera del Marco, solo que metiendo en esa Ribera Regato Plata o Arroyo de la Plata, que es una escorrentía estacional que no pertenece a la Ribera.

Otra ocurrencia del mismo candidato (ya van tres) es convertir la Avenida de la Virgen de la Montaña en un bulevar, con acerado en la parte de los pares más o menos de la anchura actual, quizá un poco más, una calzada de dos carriles y dos direcciones (bajada y subida) y el resto, hasta los edificios de los impares como un amplísimo acerado. Claro, sin señalar cómo harían los vehículos que circularan por la parte de los pares, en bajada, para acceder al garaje Norba y al buen número de garajes de los edificios de esa calle, o cómo resolver el encuentro entre Dionisio Acedo con el bulevar… Minucias.

Pues estos caramelos sin sabor alguno han salido del último local que quedaba de las golosinas de Sánchez Cortés, y están siendo vendidos por el candidato del Partido Popular, Rafael Mateos, que, si uno quita el volumen a la tele o se abstrae de los muy favorables pies de foto de los periódico, se parece mucho a un vendedor de pompas fúnebres en cualquier serie de detectives made in USA.

Porque el rictus de persona mayor (aún cuando parece joven), su posado, su caminar o sus ademanes, no se sabe si están vendiendo por el PP las bondades de un programa electoral (bondades, programa electoral y Partido Popular no conjugan bien en el mismo párrafo) o si está presentándose como nuevo cobrador del recibo de los muertos.

Las chuches desaparecidas de Sánchez Cortés no parece que vuelvan a endulzar a los niños de la ciudad, y los mayores ya conocemos cómo se gastan en la derecha, en el PP, los dulces envenenados. Por ejemplo, los 100 millones de pesetas en el mercado gourmet, o la misma cantidad en convertir la calle san Pedro de Alcántara en una calle privada, solamente utilizable para acceder a los aparcamientos particulares de la alta clase que la habita.

Vale.