Las restricciones presupuestarias impuestas por Angela Merkel a Mariano Rajoy hacen que en 2013 la Oferta de Empleo Público sea incluso más raquítica que en 2012. Y la “administración” que el Gobierno de Mariano Rajoy hace de los mandatos de Merkel demuestran su forma de entender el gobierno, castigando, siempre a los segmentos en los que resulta más sencillo recortar para no gastar y así poder presentar a su ama los sacrificios que la austeridad, según la doctrina económica neoliberal, requiere.
Y en las ofertas de empleo público, donde la destrucción es masiva, un gobierno que es fuerte con los débiles y sumiso con los poderesos lo demuestra. El mandato legal de oferta empleo, restringida al máximo, comienza a cumplir en el Consejo de… Tramposos de 22 de marzo, con la convocatoria general, que termina con un párrafo significativo: “Por último, en próximas fechas, el Consejo de Ministros aprobará los correspondientes Reales Decretos de Oferta Pública de Empleo para el Cuerpo de la Guardia Civil, Cuerpo Nacional de Policía y Fuerzas Armadas”.
El 12 de abril de 2013, el Consejo de… Tramposos aprobó las ofertas para la Guardia Civil y la Policía Nacional… y en la referencia oficial, ningún atisbo de la oferta para las Fuerzas Armadas.
En estos momentos de crisis económica, en la que los recortes sangrantes afectan a la educación, con destrucción de plazas de maestros, a la sanidad, con supresión de miles de puestos de trabajo de médicos, enfermeros, auxiliares, con eliminación en la práctica de las ayudas necesarias a la dependencia, es complicado entender que en Policía y Guardia Civil se convoquen plazas, 134, por ejemplo, para esta última. En números reales, una miseria. Pero, con independencia del mal uso que un gobierno de cobardes hace de las FCSE para protegerse y proteger a los causantes de la crisis, si se habla con los sindicatos policiales, la crítica es radical. Porque la oferta es insuficiente.
En el caso de las Fuerzas Armadas, al día de hoy, viernes 3 de mayo, sigue sin publicarse la oferta pública de empleo. El número de bajas de efectivos de tropa es clamoroso, y el número máximo fijado en la Ley de Presupuestos, de 80.000 es hoy día un tope impensable de alcanzar en un plazo de varios años. A salvo, claro, de que el Ministerio de Hacienda, con la connivencia del de Defensa esté pensando en bajar considerablemente ese número máximo. Al día de hoy, es más que probable que esos efectivos estén en torno a los 78.000. O lo que es lo mismo, el gobierno de Rajoy ha mandado al paro en un año a unos 2.000 militares. No está mal. Menos gente para desfilar en el Día del Coñazo, que diría Mariano.
Sin embargo, la oferta de empleo público 2013 es obligatorio convocarla, también, en las Fuerzas Armadas. Es obligatorio porque lo manda la Ley. Otra cosa es que se oferten plazas de soldados y marineros. Pero el tope de reposición del 10% es de aplicación, legal, para oficiales y suboficiales y para los cuerpos comunes (jurídicos, interventores). Muy pocas plazas, muy pocas, pero que el gobierno de Rajoy tiene la obligación legal de convocar.
Como es obligatorio, también, que el mandato legal se cumpla y se convoquen las plazas legales de promoción interna. Obligatorio.
Sin embargo, estas obligaciones legales no parece que apremien mucho al Partido Popular. La razón es muy sencilla: los militares, con unas incipientes asociaciones profesionales, no tienen capacidad de presión sindical.
Pero, aunque el debate militarismo/antimilitarismo sea recurrente, o pacifismo/belicismo también, la necesidad de rejuvenecer las pirámides de edad de los soldados y marineros deberían haber llevado ya a este gobierno de incapaces a convocar las plazas necesarias.
Vale.