Archivos para November 30, 1999

Afirma, reafirma y grita el candidato del Partido Popular de Extremadura a la presidencia de la Junta que ha de mandar (sic) la lista más votada. Ya me referí a la falacia, en nuestro sistema político, que supone acudir al argumento de que gobierne (mande, en el argot de la derecha) la lista más votada, cuando la elección del presidente de gobierno en las CCAA, o del propio presidente del Gobierno, e, incluso, de los alcaldes, corresponde a los cargos electos, esto es, a los parlamentarios de las asambleas regionales en el caso de la presidencia de sus gobiernos, o al Congreso de los Diputados en el caso del Gobierno de la Nación, o al pleno municipal en el caso de los alcaldes.
Es el sistema, un sistema que no le gusta al bombero Monago (cuidado con lo que dicen de esa profesión algunos correligionarios). Y como no le gusta, su determinación es que ha de mandar (gobernar, en el lenguaje democrático) el candidato de la lista más votada.
Estaría bien, claro, si ese mismo candidato, arrastrando de mala manera sus contradicciones, o, en la práctica, haciendo gala de sus ansias de mando (ansias que no son aconsejables para el ejercicio democrático del gobierno), no hubiera, por ejemplo, propiciado un pacto en la localidad de Ceclavín, en Cáceres, para que la lista más votada, la del PSOE, no gobierne, sino que lo hagan los “independientes”, con el apoyo (¿rencoroso, vengativo?) del Partido Popular.
Los resultados electorales en esta localidad cacereña fueron de 624 votos para el PSOE (44,26%), 462 para AICE (32,77%), 252 para el PP (17,87%) y 44 para I.P.Ex (3,12%). Es decir, siguiendo el argumento interesado, muy interesado, del presidente regional del partido de la derecha, debería ser alcalde de Ceclavín el cabeza de lista del PSOE.
Arrastrar esas contradicciones de esa manera no solamente deslegitima a quien pretende hacer bandera de argumentos que no se corresponden con las leyes, con el sistema, sino que pone blanco sobre negro la capacidad de hipocresía necesaria con tal de alcanzar el poder para ejecutar el mando, que no el poder para ejercer el gobierno.
Cuando el señor Monago sea capaz de dejar de arrastrar sus contradicciones en declaraciones públicas, en doctrinas privadas, es probable que pueda estar en condiciones, democráticas, de ejercer el gobierno.
Mientras tanto, sus ansias de mandar más se parecen a un trastorno alimentario que a convicciones democráticas.
Vale.

Hace unos días (11 de abril) posteaba en este mismo sitio sobre la única salida que le quedaba al candidato del Partido Gurtelar de Extremadura: convencer a sus correligionarios portugueses de derechas para que no paralizaran el proyecto del AVE en el país vecino, para conectar Lisboa con Madrid, lo que beneficiaría, sin ninguna duda, a esta tierra.
Mi post nacía de unas declaraciones de la protavoz del PSOE de Extremadur, y antes de conocer unas declaraciones del Secretario General de Extremadura del partido de la derecha, Fernando Manzano, en las que decía, según 20minutos.es: “El presidente del PP extremeño, José Antonio Monago, defenderá en una reunión que mantendrá «en los próximos días» con líderes del PSD portugués el carácter «primordial» del AVE para el «desarrollo» de Portugal, España y Extremadura, en un momento en el que «nunca estuvo más en el aire todo (sobre dicha infraestructura) que a día de hoy» (http://www.20minutos.es/noticia/1017416/0/).
Desde ese día, el presidente del partido derechista extremeño, José Antonio Monago, sigue sin entrevistarse con sus correligionarios portugueses, y ayer se conoció que el gobierno luso, en funciones, decidió terminar con el proyecto. Un gobierno en funciones porque la derecha portuguesa consiguió lo que intentó la derecha española: cargarse al gobierno. Hasta para eso es inútil la derecha presidida por el currante Mariano.
Hoy se ha conocido que el ministerio de “Fomento lanza la licitación de la línea de alta velocidad a Extremadura por más de 3.829 millones de euros, a través de la colaboración público-privada” (http://www.europapress.es/extremadura/noticia-fomento-lanza-licitacion-linea-alta-velocidad-extremadura-mas-3829-millones-euros-20110426142738.html).
Mientras que el gobierno socialista español sigue dando pasos adelante con el proyecto, el portugués, fagocitado por la derecha, ha decidido paralizarlo.
Y, a todo esto, el presunto líder (¿qué es un líder? ¿qué virtudes y capacidades debe reunir un líder? ¿cualquiera es líder por el hecho de ocupar un cargo?) de la extrema derecha en Extremadura sigue sin ser capaz de entrevistarse con sus correligionarios portugueses. Y no lo hace porque ya sabe la respuesta: no quieren ni oír hablar de semejante proyecto porque no creen en Europa, y, lo que es más grave, porque consideran que conectar Lisboa con Madrid les hará más dependientes de la economía española.
Al final de toda esta historia, es probable que Monago vaya a Elvas a hacer el paripé con algún dirigente de medio pelo portugués. Como mucho.
Y a comprar unas toallas.
Vale.

Tenía pensado no postear en algún tiempo, pero trasteando por la red me he tropezado con este comentario de José Antonio Monago en su muro del caralibro:
La portavoz del @psoeex me solicita que convenza al PSD de la bondad del AVE… Y no gobiernan los socialistas en Portugal? Y no decía Sócrates también que estaría el AVE en el 2010?… No puedo entender esta declaración de mi paisana…
Vayamos por partes. Y en algunos casos voy solamente a hacer referencias, sin acudir a hemerotecas.
En primer lugar, con motivo de las últimas elecciones portuguesas quedó meridianamente claro que el partido de derechas (como el Partido que en Extremadura preside Monago) portugués se presentaba ante su electorado con la pretensión de no seguir adelante con el proyecto del AVE que conectará Lisboa con Madrid. Ese partido de derechas perdió las elecciones.
En segundo lugar, con motivo de los sucesivos planes de ajuste llevados a cabo por José Sócrates, siempre se ha mantenido el proyecto de AVE, aunque en algún caso con algún retraso en su ejecución, pero con la vista puesta en la vertebración ibérica de la que la Alta Velocidad es un elemento indispensable. El partido de derechas portugués siguió manteniendo la eliminación del proyecto.
En ambos casos, Monago se dedicó a criticar al gobierno socialista sin tener agallas para dirigirse a sus correligionarios y exigirles, con igual contundencia al menos, que no desistieran del proyecto de Alta Velocidad.
Ahora, cuando el partido correligionario del que preside en Extremadura Monago ha conseguido lo que ni él ni su presidente nacional han sido capaces de alcanzar en España, Monago se muestra en grado sumo cínico.
La derecha portuguesa ha sido capaz, para asombro de Europa, de tumbar el gobierno de Sócrates, y, con ello, poner en gravísimo riesgo el proyecto de AVE ibérico, Monago es incapaz de alzar la voz. No le sale del cuerpo.
En un ejercicio de cinismo dice que en Portugal gobiernan los socialistas, cuando la derecha reaccionaria portuguesa ha conseguido la caída del gobierno y someter al país al chantaje del rescate.
El señor Monago no tiene ni agallas para ir a Elvas y decirle al presidente de la Cámara Municipal que no se preocupe, que habrá AVE. No. Sabe que el PSD portugués ha sido capaz de tumbar el gobierno de su país y venderlo para un rescate vergonzoso.
A Monago, en su cínica respuesta, en su respuesta cobarde, se le ve el plumero: el plumero de pertenecer a un partido de derechas, muy de derechas, que por la incapacidad de sus jefes nacionales no ha conseguido lo que pretendió en mayo de 2010: la caída del gobierno socialista.
A Monago habría que preguntarle si su partido, que tanto pide elecciones anticipadas, conoce el artículo 113 de la Constitución. Quizás nunca haya llegado hasta él.
A Monago habría que preguntarle si tiene algo que decirle a sus correligionarios portugueses para que ante la próxima contienda electoral, bajo el paraguas del chantaje, del rescate, sean capaces de incorporar a sus propuestas el proyecto ibérico vertebrador de la Alta Velocidad.
Pero para eso, Monago, no compra kinders.
Vale.

Hace unos días, la diputada pepera Celia Villabolos aludió en tono despectivo a la enfermedad del vicepresidente del Gobierno, Alfredo Pérez Rubalcaba. Esa alusión era una continuación natural del desparpajo mediático de los medios de comunicación al servicio, incluido el servicio previo pago, del Partido Gurtelar.
La exquisitez con la que la izquierda trató a Esperanza Aguirre contrasta con la desvergüenza de la extrema derecha mediática y de gente como Celia VillaBolos, pero la realidad es tozuda y esa desvergüenza tiene su precio.
El pasado viernes, a última hora de la tarde, las agendas de prensa para el sábado 12 de marzo recogían una convocatoria del Partido Gurtelar para un acto a celebrar en Talavera de la Reina, con la participación de la candidata a la presidencia de Castilla La Mancha y Secretaria General María Dolores de Cospedal, la presidenta de la comunidad de Madrid y de nuevo candidata, Esperanza Aguirre, y el candidato a la presidencia de Extremadura, José Antonio Monago. El tema era el AVE.
La señora Aguirre no asistió. Sencillamente, dio plantón a Cospedal y Monago.
En los discursos, según las referencias que he podido ver en los medios de comunicación, ninguno de los dos abandonados candidatos, Cospedal y Monago, aludió para nada a la ausencia de Esperanza Aguirre. La convocatoria no puede achacarse a los medios de comunicación. Esa convocatoria salió de la sede del Partido Gurtelar, de cualquiera de sus sedes. Y colocar a Esperanza en los carteles era un señuelo. Si la presidenta de la comunidad de Madrid no estaba en condiciones de asistir, Cospedal y Monago deberían haber consultado a la doctora Villabolos, que les podría haber explicado, por ejemplo, que a doña Esperanza le traía al pairo las chorradas que se montan dirigentes de medio pelo como Cospedal y Monago.
Quizás, también, la presidenta de la Comunidad de Madrid estará indignada con el Partido Gurtelar extremeño por la actuación de la candidata a la alcaldía de Cáceres en la contrata del servicio de agua, que ha puesto en entredicho la capacidad técnica y jurídica del Canal de Isabel II, y su solvencia empresarial.
Solamente el boletín oficial de Esperanza Aguirre, el ABC, por supuesto, se refería a que no habría podido asistir al encuentro debido a su reciente enfermedad. En Extremadura, el órgano oficial del comité central del Partido Gurtelar, el diario HOY, se refería a que la señora Cospedal había comido queso en Valdefuentes.
Lo que le sucedió el sábado al candidato Monago en Talavera de la Reina fue un plantón en toda regla por parte de Esperanza Aguirre. El que la presidenta de la Comunidad de Madrid no asistiera debido a su salud no puede tomarse en serio si aplicamos la doctrina Villabolos.
Vale.


Hoy, 11 de enero de 2011, el Partido Popular de Extremadura ha presentado una campaña bajo el lema “te escuchamos”, que incluye un vídeo colgado por el propio partido en su canal de Youtube: http://www.youtube.com/user/ppextremadura#p/u/0/3_1TwT3wNII.
Ese vídeo que promociona a un partido político que es firme partidario de la familia en el mismo sentido que defiende la conferencia episcopal, contiene algún error de los que se estudian en esos programas en los que se analizan los fallos de las películas.
En este caso, no se trata de que en una secuencia aparezca un elemento y desaparezca en la siguiente, o al revés. Se trata de un error de concepto. Un error que tiene su punto de gracia, y que a la vista del detalle, tiene su regusto de que, por fin, alguien en el Partido Popular es coherente consigo mismo.
En una reciente entrevista publicada en el diario regional HOY con el presidente regional del partido de la derecha (toda la derecha, incluida la extrema), aparecían dos conceptos que llaman la atención. Por un lado, una frase – fuerza en el discurso del derechista Monago, aprendida de su mentor e ideólogo de cabecera, el alcalde Celdrán: “la burra, por lo que vale”. Por supuesto, en ningún momento aclara cómo se fija el valor de la burra. Eso ya es estudiar ciencias exactas y economía en Moody’s. El segundo concepto era el estado civil del candidato a presidente de la Junta de Extremadura.
La vida privada de los demás siempre me ha importado un comino. Allá cada uno con ella. Pero cuando la vida privada y sus avatares tiene o puede tener repercusiones públicas, sí es interesante. Recuerden los más jóvenes cómo se llamaba en mentideros ministeriales al ahora, de nuevo, en el candelabro, Álvarez-Cascos. El Almendro. Y su situación familiar acarreó algún disgusto protocolario.
En la citada entrevista con Monago, diciembre de 2010, se señala que el candidato de la derecha es divorciado. Sin embargo, en sitios de internet oficiales, en los que su labor pública es de trascendencia para los afiliados de su partido (web del partido) y de trascendencia para todos los extremeños (web del Senado), su estado civil se señala que es el de casado, como se aprecia en estos enlaces:
Senado:
http://www.senado.es/legis9/senadores/256_index.html
Web del Partido Popular de Extremadura:
http://www.ppextremadura.com/index.php?opc=biografia

Recuérdese que este pasado verano, en el mes de julio, fue noticia que el senador Monago se ausentó de, al menos, dos plenos del Senado, del que cobra por representarnos a todos, porque estaba de crucero. Es decir, abandonó sus obligaciones para con todos los extremeños, ya que representa a Extremadura por designación de la Asamblea, para un viaje de placer. Como un controlador cualquiera.
Sigo manteniendo que la vida privada de cualquiera me importa un comino. Pero en afirmaciones del interesado, cuando se fue de crucero (julio), decía que ya hacía mes y medio que lo tenía contratado.
Para un partido político que en su concepción de presencia en la sociedad el modelo tradicional de familia, el mismo defendido por la jerarquía de la iglesia católica, es el que hay que preservar, por qué un miembro destacado de ese partido abandona sus obligaciones para con todos los ciudadanos en una viaje de relax, por no calificarlo de otra manera. ¿Un crucero es eso, no?
Claro que es relevante para los ciudadanos saber si los dirigentes políticos propugnan una cosa en público y en privado hacen la contraria. Algo que, dicho sea de paso, solamente se reclama de los dirigentes de los partidos de izquierda.
Al día de la fecha, en la página oficial del partido sigue apareciendo el estado civil de “casado” del señor Monago. Y en la web del Senado lo mismo.
Ahora, el vídeo de propaganda del Partido Popular, por fin, acude a la coherencia. El protagonista, un ciudadano maduro, de clase media (pijama de tergal azul clarito, corbata tirando a granate, lisa, traje clásico), se prepara para una entrevista de trabajo. Aparece en el cuarto de baño, pasando sus manos por la cara y bajo el grifo. Sale al pasillo, donde su hijo le da una palmadita de ánimo, y, antes de salir a la calle, donde le espera Monago y el Partido Popular en pleno, el protagonista del vídeo se despide de una señora. ¿Es su esposa? Desde luego, en el vídeo se aprecia claramente en la mano derecha de la señora una alianza matrimonial, y la voz en off que nos relata la historia se refiere a ella como “tu mujer”. Curioso…
… Curioso porque en el vídeo propagandístico de un Partido que defiende a la familia tradicional nunca se ve en las manos del protagonista, ciudadano tradicional, de clase media, ninguna alianza. Y la tradición manda que las alianzas las lleven marido y mujer.
En el vídeo del Partido Popular, la esposa está atada por la alianza. El ¿marido? no lleva ninguna ¿ninguna atadura, ningún compromiso?
Cada uno arrastra sus contradicciones como puede.
Vale.

En fechas recientes, tras la visita del Jefe del Ejército a las instalaciones del Campamento de Santa Ana y tras una carta al director en un medio local (Diario HOY), se ha levantado la correspondiente polémica política, como no era por menos de esperar, que llegó a su punto más caliente cuando la portavoz del Partido Popular en el Ayuntamiento acusó al Ministerio de Defensa de robar a la ciudad de Cáceres y de especulación urbanística.

Gruesas acusaciones que no tendrían más valor si se pronunciaran por un lego en derecho, pero no por alguien que ejerce la abogacía. Está claro que la primera acusación, la de robo, se hacía en términos políticos, pero la de especulación lo es en términos económicos y eso ya es otra cuestión. Con el tiempo, no tardando mucho, la portavoz del PP se verá en la obligación de aplacar su vocabulario tremendista, vocabulario por otra parte que forma parte de la línea ¿ideológica? de su partido.

Interesante también fue ver cómo en el medio local (diario HOY) se publicaba, sin más, una carta al director firmada por el jefe del gabinete de prensa del JEME y cómo, tras una información publicada en el otro medio local (El Periódico Extremadura), se hacía un refrito con un aparatoso titular, todo ello trufado de entrecomillados sacados de la mencionada carta.

A todo esto, los medios de comunicación locales siguen siendo poco dados al conocimiento de los asuntos y de los conceptos. Y en materias complejas como la Defensa Nacional, esa falta de formación y de preocupación por aprender se nota desde lejos.

El Diario regional HOY, del grupo Vocento, podría haber recurrido a informaciones publicadas por diarios de su grupo, en concreto, por el Diario ABC, a mediados de julio, y por medios locales en Toledo, para conocer la polvareda que montó en dicha ciudad el mismo documento que en Cáceres mantiene y da pervivencia de futuro a las instalaciones del Campamento de Santa Ana. También la portavoz del PP local podría haber contactado con sus correligionarios toledanos para informarse.

A mediados de julio, en Toledo, en el pleno municipal se hablaba y mucho de la Directiva de Reestructuración de Centros Docentes Militares, aprobada por el Jefe del Ejército a mediados de junio. ¿Cómo habían tenido los grupos municipales conocimiento de dicha directiva?

En Cáceres, que se sepa, ninguna autoridad del Ministerio de Defensa ni del Ejército había informado de la situación de los Centros Docentes militares ni al Ayuntamiento ni a la Junta de Extremadura, que tienen suscrito un protocolo general de intenciones (que no un convenio, a ver si distinguimos los conceptos) que afecta a la finca donde está el CIMOV nº 1, o, como se llama ahora, CEFOT nº 1.

No es de recibo que visite las instalaciones el Jefe del Ejército y se emitan comunicados de prensa sobre ello y luego una carta al director si antes nadie ha informado a las autoridades locales. Seguramente, y conociendo un poco el funcionamiento de la administración militar, la visita tuvo lugar en un contexto en el que ya se daba por hecho que las autoridades locales conocían el contenido de la Directiva. Pero no es así.

A todo esto, en Toledo se echaban las manos a la cabeza clamando contra la desaparición de la Academia de Infantería, a lo que tuvo que salir al paso el mismo gabinete de prensa.

Aunque otro día trataré de explicar por qué no se ha podido cumplir lo previsto de trasladar a Cáceres un regimiento de ingenieros, solamente un detalle: el senador Monago ha hecho una pregunta con un entrecomillado falso. Ha preguntado, en julio, al Gobierno sobre el regimiento de ingenieros con un entrecomillado: El día 31 de Abril de 2004, el entonces Ministro de Defensa, Sr. Bono, en la Base Militar de Santa Ana (Cáceres), afirmó textualmente que «a partir de 2006 en la Base de Cáceres se instalará un Regimiento de Ingenieros».

Bono nunca habló en abril de 2004 de un Regimiento de Ingenieros. Lo sé porque yo estaba allí y Monago, no.

Vale.

Según el diccionario de la RAE, en su primera acepción, líder es la “persona a la que un grupo sigue reconociéndola como jefe u orientadora”. Viene del inglés leader, que significa guía.
En estos días venimos asistiendo a las informaciones referidas a que el senador por la Comunidad Autónoma, José Antonio Monago, se encuentra de crucero, cuando la cámara legislativa a la que pertenece tiene abiertas sesiones de trabajo. En esas informaciones se refieren a él como el “líder de los populares extremeños”. Si utilizamos la traducción de leader, la expresión sería “guía de los populares extremeños”. Y, claro, si el guía, si el líder, si el orientador se toma vacaciones cuando la función que ejerce no lo está, el ejemplo es cuando menos, llamativo.
A nivel nacional, al líder de los populares, al guía de los populares, Mariano Rajoy, también conocido como Mariano Camps por su indisoluble fusión con el presidente de la Comunidad Valenciana, se le representa como un indolente inactivo que no toma decisiones (véase las viñetas de Peridis en El País). La imagen es certera. La falta de capacidad de trabajo del guía, del orientador, del líder de los populares tiene un ejemplo definitivo: afirma que no presenta una moción censura contra el Presidente del Gobierno porque no tiene los votos para que prospere. En realidad, lo que no quiere es trabajar, presentar una alternativa. Si lo hiciera, no tendría más remedio que decir qué haría. Y eso es mucho esfuerzo.
Si el líder nacional es trasunto de indolencia, ¿qué no harán los líderes locales? Pues eso, irse de crucero.
Pero, en realidad, estamos ante otra cosas. A cualquier cosa llaman líder. El ejercicio del liderazgo sería, según la Wikipedia: El liderazgo se puede decir que es toda capacidad que un individuo pueda tener para influir en un colectivo de personas, haciendo que este colectivo trabaje con entusiasmo en el logro de objetivos comunes. Se entiende como la capacidad de tomar la iniciativa, gestionar, convocar, promover, incentivar, motivar y evaluar a un grupo o equipo. Es el ejercicio de la actividad ejecutiva en un proyecto, de forma eficaz y eficiente, sea éste personal, gerencial o institucional (dentro del proceso administrativo de la organización).
Como puede apreciarse, al liderazgo se le asocia el término trabajo, algo que es incompatible con la actitud efectiva y real de esas cosas que los medios de comunicación, en su afán por clasificar y economizar esfuerzos, llaman líderes. Si al concepto de trabajo le añadimos los de iniciativa, gestión, convocatoria, promoción, incentivos y motivación del grupo al que los presuntos líderes guían, entendemos que cuando el líder, presunto líder, abandona sus obligaciones para irse de crucero o cuando el líder, presunto líder, no ejerce las atribuciones que por sus obligaciones tiene, estamos hablando de otra cosa.
La derecha, en este país no tiene líderes. Tiene guías, pero no están en sus estructuras visibles. Los guías están en las empresas editoriales que les marcan la ruta que han de seguir, que son los que les hacen el trabajo para el que esos líderes no están capacitados, a cambio de conseguir posicionar sus productos (periódicos, radios, cadenas de televisión) entre quienes deberían ser los guiados, los orientados.
Así, mientras la basura sigue subiendo por las fachadas de Génova, 13, los presuntos líderes nacionales tratan de escabullirse de sus obligaciones. Así, mientras el único esfuerzo al que el presunto líder local de los populares extremeños se entrega es al de imitar de mala manera al Presidente de la Junta de Extremadura (el último ejemplo es el twitteado de Monago, que es motivo de escarnio en todos los foros tecnológicos), noes de extrañar que su crucero de placer sea tapado vergonzosamente por el mismo medio que lo publicó impidiendo comentarios en la edición digital.
Vale.
En una entrevista publicada en el día de hoy por El Periódico Extremadura con el presidente regional del PP, José Antonio Monago, se aprecia una perla que no resultará llamativa para los zappings de prensa, pero que resulta clarificadora para analizar la capacidad de quien aspira, según él, a presidir la Junta de Extremadura.

La cita exacta es (http://www.elperiodicoextremadura.com/noticias/noticia.asp?pkid=450831):
–Una de las ideas de Vara con mayor repercusión nacional es la creación de un foro autonómico sin el Estado, ¿qué le parece?

–Creo que sirve para una foto y poco más. Pienso que para unificar las tarjetas sanitarias y cosas así está el Estado, que debe coordinar las políticas autonómicas. Me parece muy triste que se reúnan las comunidades sin el Estado.

«Me parece muy triste que se reúnan las comunidades sin el Estado». Se nota que Monago es alumno aventajado de la FAES, seguidor seguro de José María Aznar y discípulo ideológico de Manuel Fraga: no creen en el «Estado de las Autonomías». Mientras que Manuel Fraga, desde AP pidió la abstención en el referéndum de la Constitución por estar en contra del Título VIII, las Autonomías, José María Aznar, entonces avezado escritor de cartas al director de los periódicos desde Logroño, clamaba contra el mismo título, y, después, cuando fue presidente del Gobierno, trató, por todos los medios, de identificar todos los poderes del Estado en el suyo mismo. Ideología que imparte ahora desde la FAES.

Ignora el señor Monago, al parecer doctor en derecho, qué es el Estado. Confunde, quizá por ignorancia, Estado y Gobierno. Parece mentira que quien aspira a ejercer el poder ejecutivo en una Comunidad Autónoma, no sepa qué es el Estado.

Esa ignorancia no debe venir de sus estudios académicos formales, y menos aún de haber leído, aunque sea de pasada, la Constitución Española de 1978. El Estado es todo: poderes ejecutivo, legislativo y judicial. Poder ejecutivo es el Gobierno, pero también lo son los gobiernos autonómicos, las diputaciones provinciales y los ayuntamientos. Poder legislativo son las Cortes Generales, Congreso y Senado, pero también los parlamentos autonómicos. Poder judicial son los juzgados de lo social y los de primera instancia, las audiencias provinciales, los tribunales superiores de justicia, el supremo, el constitucional… Todo eso es el Estado, ignorante Monago (¿o no tan ignorante?).

Si se reúnen los presidentes de las Comunidades autónomas, se está reuniendo una parte del Estado. Lo mismo que si se reúne el presidente del Gobierno con el presidente de la Junta de Extremadura. Son una parte del Estado, del poder ejecutivo.

Quizás el ignorante Monago no lo es tanto. Sabe perfectamente que un Foro Autonómico es una reunión de una parte del Estado. Pero en su ideología, sigue vigente la segunda legislatura de José María Aznar, cuando ejerció el poder ejecutivo de modo totalitario, ignorando que una parte de ese poder lo ejercen, como Estado, las comunidades autónomas.

En esa frase llena de ignorancia aparente, Monago se está retratando: no cree en las autonomías, no cree en el título VIII de la Constitución, como no creyeron ni creen, Manuel Fraga ni José María Aznar.

Señor Monago: aunque le pese a su ignorancia ideológica, la Junta de Extremadura y la Asamblea de Extremadura son Estado. Y un Foro Autonómico, también es estado. La única tristeza, para usted, es que nunca estará en ese Foro, porque quien no cree en la autonomía no puede ejercer su gobierno.

Vale.

La Espe, digo, la lideresa Esperanza Aguirre Gil de Biedma, ha pasado por Extremadura en esta campaña electoral y ha dejado las perlas de rigor, avaladas por los hojalateros Monago y Cía, entre ellas, que Extremadura está lejísimos y mal comunicada. Según Europa Press, para la presidenta de la Comunidad de Madrid está «mejor comunicado Madrid con Lisboa que con Extremadura y esto ha convertido realmente las provincias extremeñas y especialmente a la provincia de Badajoz en una de las provincias peor comunicadas de toda España», tras lo cual aseguró que «muchos más madrileños tendrían que visitar –las ciudades extremeñas– si hubieran mejores infraestructuras para llegar».
¡Qué lástima que la realidad termine estropeando estas tonterías! Sacaron a pasear el Falcon que utiliza el Presidente Zapatero y no son capaces de explicar que Rajoy no vuela como cualquier ciudadano: sus vuelos de campaña electoral se acogen a los beneficios de diputado en el congreso. Por ejemplo. Y seguro que están temblando por la amistad entre Silvio The Godfather Berlusconi con José María Aznar (¿y si Josemari ha estado en las fiestas de Villa Certosa?).
La realidad, señorona Espe, es tozuda, y la realidad es que muchos madrileños vienen a Extremadura, unos a comprar patatera, otros, a hacerse una casa, casita o casona. Para esos muchos madrileños lo que usted dice, señorona Espe, no será verdad. O no le hacen ni caso. O, lo que es peor para usted, que miente más que habla.
Y la muestra, señorona Espe, es de su misma sangre, de su misma alcurnia: el Diario Oficial de Extremadura publica hoy, 5 de junio de 2009, un anuncio que la desmiente, o, mejor, que la deja a usted, señorona Esperanza Aguirre, por mentirosa.

ANUNCIO de 22 de abril de 2009 sobre construcción de vivienda unifamiliar.Situación: paraje “Juan Rasero”, parcela 363 del polígono 3. Promotor:D.ª Isabel Aguirre Gil de Biedma, en Villanueva de la Vera.
Su hermana, su propia hermana, la desmiente y se hace una casa en La Vera. ¿Será su hermana socialista? ¿Progresista?
Esperanza Aguirre: cuando en campaña electoral se dicen tonterías, hay que cuidarse mucho de que la propia familia no desmienta afirmaciones.
Y los hojalateros Monago y Cía, que aplaudían con las orejas tamañas falsedades, ¿qué dirán ahora? ¿Dirán que es un error de la información?
Vale.
Hoy se ha hecho público el dato del paro del mes de mayo: 24.741 personas han abandonado la lista de desempleados. Siendo prudentes, no es un mal dato. Siendo ideológicos, demuestra que la intervención del Estado (papá Estado) con el Plan E es necesaria no sólo en tiempos de crisis como ahora, sino siempre. Siendo personas, es una buena noticia para esos 24.741 parados menos. No hay que ser excesivamente optimistas, ni triunfalistas.
Sin embargo, algún declarado cristiano (esos que apoyan a las familias normales, que están en contra del aborto, que callan ante noticias como las de Irlanda…) no tiene ningún ápice de comprensión. La crisis es un argumento político. Los orígenes de la crisis (desregulación, ultraliberismo, neocons, Bush, Aznar) no son analizados. Cuando el Estado ha desaparecido, el mercado se ha convertido en una selva, y la selva se ha incendiado. Los mantenedores del incendio se frotan las manos, pero el Estado ha tenido que salir al rescate.
José Antonio Monago, presidente del PP de Extremadura, al conocerse el buen dato (aunque solamente se refiera a un mes, el de mayo) del paro, ha reaccionado como se esperaba: con una frase que es todo un programa electoral, que es una confesión de parte ideológica. Esos 24.741 parados menos deben ser un borrón en su línea argumental.
¡Pobres parados que encuentran trabajo, que encuentran el pan, volverán a perderlo, volverán a pasar hambre! Así da gusto, con reaccionarios como Monago, con individuos que no se alegran de las alegrías de los demás, sino que sienten que sus úlceras ideológicas se revuelven, se «tumorizan».
Para un individuo como Monago, un dato positivo (mínimo, si se quiere) es «pan para hoy, hambre para mañana». Esos 24.741 trabajadores han traicionado los esfuerzos que la derecha, derechona, ultraderecha vienen haciendo para hacer de esta crisis su cruzada contra el infile Zapatero.
Esos 24.741 trabajadores que en mayo han encontrado su pan deben, según Monago, volver inmediatamente a pasar hambre para que su partido pueda ganar las elecciones.
Vale.